En esta ocasión publico un texto de mi libro "Hijos de Gaia". Se trata de "Bestiario", un canto a la fantasía, esa parte del Ser Humano en que todo es posible.
Para que lo disfrutéis a gusto he puesto también el enlace al vídeo en que lo recito con música. ¡Disfrutadlo!
Foto: Ana Matesanz |
Bestiario
Érase una vez en algún lugar de la
memoria colectiva de la Humanidad. En aquella neurona olvidada en la que vuelan
dragones y cantan sirenas. Allí donde las hadas danzan bajo la Luna y los
duendes hacen trastadas.
En aquel lugar, existe una ilusión tan
poderosa que te hace dudar de si la mariposa que ven tus ojos es sílfide o
insecto. O que el sonido de las hojas de un pequeño remolino en el bosque es el
susurro de un gnomo. Allí, el burbujeo del agua quiere ser ondina llamándote a
lo más profundo de su fuente; y la feroz esfinge exige contestar un acertijo
cuya respuesta está en tu corazón.
En ese pais los castillos no son para
disputar batallas, sino para albergar fantasmas y brujas. Y además, despertar
princesas atrapadas por magos hechiceros, habitantes de bosques oscuros,
compañeros de lobos y búhos. De vez en cuando algún Arco iris y pequeñas luciérnagas colorean la vida, dotándola de
una magia luminosa, digna de ser contada a los cuatro vientos por genios
salidos de una botella.
En ese punto en que unicornios y
pegasos cabalgan juntos hacia el lugar entre la vigilia y el sueño. Donde los
anhelos sin prejuicios se imponen sobre la realidad material y simplemente
viven irrealidades muy reales sobre sueños no soñados.